jueves, 11 de julio de 2019

Aproximación al pensamiento de la escuela tomista. Segunda de las 24 tesis tomistas

CLASE III: Segunda de las 24 tesis tomistas

1.- Enunciado de la tesis 
TESIS II: “El acto, por lo mismo que es perfección, no está limitado sino por la potencia, que es una capacidad de perfección. Por consiguiente, en el orden en que el acto es puro, no puede ser sino universal y único; por el lado en que es finito y múltiple, entra en verdadera composición con la potencia” (1)

2.- Nota preliminar: 
Al concluir la clase anterior llegábamos a la siguiente afirmación:
“Acto puro quiere decir incompatible con toda mezcla, ya sea entendiendo mezcla como acto que es recibido en una potencia o cuando puede ser modificado ulteriormente. Por tal motivo el concepto de Acto puro sólo es aplicable a Dios. El resto de los seres son contingentes, compuestos de potencia-acto, principios intrínsecos y universales constitutivos del sujeto finito”
Encontramos en ella dos caminos abiertos para continuar nuestra investigación con la ayuda de la segunda tesis: indagar sobre el acto puro y profundizar sobre la composición acto-potencia en los entes finitos. Este último camino de profundización nos exige una nota previa referida a una característica ineludible en el abordaje intelectual del ser que es su analogía.
Analogía
En el uso de los conceptos nos enfrentamos con tres posibilidades: a. Término unívoco: a sujetos idénticos atribuirle un único concepto de manera idéntica (2); b. Término equívoco: atribuir un concepto a diversos sujetos en sentido diverso (3); y, c. Término análogo: a sujetos diversos atribuirles un mismo concepto con una significación en parte la misma y en parte diversa (4)
Diversos tipos de analogías
Siguiendo a Aristóteles partimos de la comprobación de que el ser se dice de múltiples maneras, no es ni unívoco ni equívoco, sino análogo. Y con Tomás de Aquino asumimos el fundamento de este principio: el ser tiene una unidad peculiar: algo que es, pero diversamente.; dicho de otro modo, los entes se realizan de múltiples maneras, proporcionalmente iguales. De allí que podamos asumir el ser en una noción sin anular su diversidad.
En la búsqueda de una tipología la escuela señala: a.- analogía de proporción; b.- analogía de proporcionalidad; b.1.-  analogía de proporcionalidad propia; y, b.2.- analogía de proporcionalidad impropia.
a.- Analogía de proporción: Aquella organización inteligible análoga se realiza sólo en un ente (que llamamos primer analogado) y se atribuye a los demás (llamados analogados secundarios) por una relación real con él. Ejemplo: sano se dice del ser viviente animal pero también se atribuye al alimento que provoca la salud, o al rostro que refleja el estado de salud y al clima que resulta saludable.
b.- Analogía de proporcionalidad: Aquella organización inteligible análoga se realiza en todos los analogados, pero de modo diverso, aunque proporcionalmente igual.
b.1.- Analogía de proporcionalidad propia: Aquí se aplica propiamente la definición planteada. Ejemplo: la “percepción visual” es al sentido de la vista (estructura psicobiológica de la percepción visual) como la “percepción intelectual” lo es al entendimiento.
b.2.- Analogía de proporcionalidad impropia: es aplicable al caso de la metáfora. Ejemplo: “alegre mañana” es una aproximación metafórica para destacar un aspecto de la mañana que es a la mañana de ese día como la alegría al alma del hombre. Aquí se da sólo una semejanza y no una realización óntica.
¿Cuál de las analogías es la propia del ser?
Recordemos la constatación inicial: “Se dice ‘ser` de todos los seres. Pero no se dice de todos en idéntico sentido porque cada uno de ellos es esencial y propiamente distinto. Dicha noción comprende todos los seres y también su diversidad. Y es por ello que su consideración es bajo la razón de analogía”
Indaguemos sobre la cuestión:
a.- “El ser se realiza en todo lo que es” por tal motivo excluimos, como primer paso, la analogía de proporcionalidad impropia.
b.- El ser se realiza en todo lo que es “dejando al descubierto una relación constante entre [lo que] y [es]”. De allí que puede hablarse en primer lugar del ser bajo la razón de analogía de proporcionalidad: el existir substancial es a la substancia, como el existir cualitativo es a la cualidad, o el existir cuantitativo es a la cantidad.
c.- La respuesta a la pregunta propter quid es múltiple y aparece bajo diferentes sentidos, pero proporcionalmente semejantes. Ahí estamos hablando de analogía.
d.-  El ser que se realiza en todo lo que es “posee el ser en sí (substancia) o lo recibe en otro (accidente)”. Esta profundización en la constatación sobre lo real nos muestra que los accidentes son determinaciones y/o manifestaciones de la substancia y que su capacidad de ser (el existir) sólo aparece en un sentido secundario (al modo de “apéndice” de la substancia) ya que es la substancia lo que propiamente posee el ser (o existir). (5) En la Escuela se dice que a esta distinción le es propia la analogía de proporción en la que los analogados inferiores (en este caso los accidentes) sólo expresan la calificación de análogo por referencia o relación de dependencia a un primero. Metodológicamente esta apreciación es propia de Santo Tomás, y es el momento especulativo en el cual introduce dentro del aristotelismo el concepto de “participación” (6).

3.- Explicación de la Tesis
Se ha planteado en la tesis anterior la distinción real que existe entre potencia y acto. Además, al profundizar su relación al modo de principios vinculados entre sí, se constata que el principio potencia puede asumirse como capacidad real de perfección ya que dicha capacidad permite recibir el principio perfectivo al modo de limite. Dicho principio perfectivo es lo que se denomina “acto”. Considerado en sí mismo el acto significa perfección; el límite o aquello que se establece como límite, es cierta imperfección o privación con capacidad de adquirir perfección, a lo cual se lo denomina “potencia”.
Primer resumen:
a) La potencia es el sujeto en que se recibe el acto. 
b) El acto es limitado por la potencia que lo recibe. El acto no se limita por sí mismo, pues de suyo es sólo perfección (no comporta imperfección alguna).
Las relaciones que se establecen entre estos dos coprincipios “acto-potencia” pueden considerarse a la luz del concepto de participación que hemos expuesto en la nota preliminar. Recordamos que participar es tener algo en parte. Acto y potencia se relacionan como lo participado y el participante. Esto supone que hay otros sujetos que poseen también aquella misma perfección sin que ninguno de ellos la posea plenamente (el sujeto no se identifica con aquello que adquiere, sino que simplemente lo posee como algo recibido). Lo opuesto a tener por participación es ser algo o tenerlo «por esencia», tenerlo de modo pleno e identificándose con aquello. Este es el caso del acto puro al cual llamamos Dios, el Ser que es por esencia.
Segundo resumen:
a) La relación “acto-potencia” es de participación; en cambio, un acto puro es un acto por esencia
b) El acto se multiplica por la potencia. Esto significa que un mismo acto se puede dar en muchos debido a la multiplicación de sujetos que lo reciben
Agregamos una explicación final tomada del Hugon en el comentario a esta tesis: Ahora bien; el ser infinito necesariamente ha de ser único. Si hubiera dos infinitos realmente distintos, algo real tendría el uno para poderse distinguir del otro, y esta realidad diferencial evidentemente sería una perfección, que no se hallaría en el segundo. Quien carece de una sola perfección no puede llamarse la plenitud del ser; está limitado y sujeto a la potencia; no puede concebirse ya como acto puro y perfecto. La misma hipótesis del acto puro se convierte en aire, al dejar de ser ilimitado y único. Es, pues, en todo rigor, evidente el axioma: «En el orden en que el acto es puro, no puede menos de ser ilimitado y único.»
Notas:
(1) Cfr. “Actus, utpote perfectio, non limitatur nisi per potentiam, quae est capacitas perfectionis. Proinde in quo ordine actus est purus, in eodem nonnisi illimitatus et unicus exsistit; ubi vero est finitus ac multiplex, in veram incidit cum potentia compositionem”
(2) Ejemplificación de término unívoco: hombre se predica idénticamente de Juan, Martín o Manuel.
(3) Ejemplificación de término equívoco: capital como ciudad cabecera de un estado o como patrimonio de una persona física o jurídica.
(4) Ejemplificación de término análogo: salud se dice del alimento que provoca la salud, o al rostro que refleja el estado de salud y al cuerpo que se encuentra saludable.
(5) Nota: Más adelante se verá que, aunque la substancia ejerce de por sí la capacidad de ser (o existir), en su finitud depende para existir de la acción del Creador.
(6) Cfr. Dersis, Octavio Nicolás. La participación del ser.